Y de pronto, miré a mi alrededor, todo parecía normal, como siempre, pero comencé a fijarme en pequeños detalles y me dí cuenta de que todo lo que creía conocido, se volvió totalmente desconocido, pensé que eran más que tonterías que pasaban por mi cabeza, así que los días pasaron, poco a poco solo me preocupaba por lo que yo necesitaba, hasta que, volví a mirar más detalladamente todo aquello que me rodeaba, era aun más desconocido para mis ojos, más ajeno a mí, cada vez me importaba menos, hasta que decidí frotarme bien los ojos y probar a mirar de nuevo, fijarme un poco más, y pude ver las cosas con claridad, realmente todo había cambiado, quizás ya era tarde, o quizás no.Esto suele pasarnos, y bastante, ¿cuánto hace que comenzó el curso? Meses, muchos meses y yo lo recuerdo como si fuera hace pocas semanas, y si miramos ahora ya estamos en verano casi, apenas un mes, cuando queremos acordar, nos damos cuenta de todos los momentos que hemos vivido, con personas quizás no perfectas, pero si increíbles, pero ahora, esas personas, ¿Siguen estando a nuestro lado? ¿O no hemos querido verlo?
A veces, cuando decides echar un vistazo atrás y vuelves a mirar hacía delante te das cuenta, de todo lo que has perdido, de todo lo que te has quitado de encima, de todo lo que un día te hizo sonreír, o quizás te hizo daño, de todo lo que creías sincero, pero sin embargo lo miras ahora y puedes verlo más claro, con más nitidez hipocresía, mentiras, tantas personas con las que pensabas que podías contar aquél día, y ahora te das cuenta de que aunque estés rodeado de personas, quizás realmente no lo estés, quizás solo sean ilusiones que permanecen a tu alrededor, que lo más probable es que un buen día cuando quieras volver a mirar, ya no estén, haya desaparecido y solo queden recuerdos y fotos en blanco y negro. ¿Recuperables ? Quien sabe, solo podremos contestarnos nosotros mismos.
Pero a veces, es mejor no recuperar lo perdido, olvidarnos, de algún modo y fijar nuestra vista hacía adelante contemplar a quien tenemos a nuestro alrededor y mantener esas personas en nuestra vida, el mayor tiempo posible,conseguir que no solo formen parte de un abrir y cerrar de ojos en nuestra vida, conseguir que formen parte de silencios, y que no sean incómodos, que permanezcan en nuestros recuerdos, y nunca dejar que se marchen sin antes despedirse y dejar huella.
Millones de personas, que pasan por nuestra vida, podremos ver desde la sonrisa más falsa e hipócrita hasta la más sincera y perfecta.
